La cultura asociada al espacio de trabajo será la pauta que demarcará los valores y principios que compartirán tú y tu equipo de trabajo, es por eso que es vital para el correcto desarrollo de tu empresa y para la consolidación de objetivos a largo plazo.
La cultura de trabajo presenta varios beneficios cuando está bien afianzada. Es que, a partir de ella, tus empleados podrán comprender verdaderamente cuál es el propósito de tu empresa. Diferenciarse y resaltar entre competidores, definir una forma compartida de hacer las cosas y comprometerse con el desarrollo a futuro de la compañía.
Un equipo sólido y con los pies en la tierra tendrá mayores posibilidades de no abandonar en medio del camino porque sabrá que otros cuentan con él. Así, además, te asegurarás de retener junto a ti aquellos talentos elementales para tu crecimiento.
Entonces, ya ha quedado clara la importancia y beneficios del desarrollo de una cultura fuerte, ahora pasemos a lo siguiente: ¿Cómo construirla? ¡Sigue leyendo para saber más!
1– Crea un espacio saludable
Un espacio saludable, sobre todo mentalmente hablando, es vital para el desarrollo de una cultura laboral fuerte y equipos consolidados y comprometidos. De hecho, la profesora de la escuela de negocios de Hardvard, Amy Edmonson, dice que: “un ambiente psicológicamente sano le brinda a los empleados una sensación de confianza en cuanto a que su equipo no los avergonzará, rechazará o castigará por animarse a levantar la voz”.
Si te aseguras de brindar un espacio sano y abierto entonces tus empleados se verán más propensos a participar activamente, apoyarse y acompañarse entre ellos, alentar e incorporar ideas nuevas y distintas, hacer sentir cómoda a la gente cuando comparten sus miedos o críticas y, por último, ser comprensivos ante los errores y los riesgos.
2 – Introduce propiamente a tus nuevos empleados
El momento clave para empapar a tus empleados dentro de tu cultura es aquel de su llegada. Introducir la cultura compartida desde el comienzo los hará sentir verdaderamente parte del equipo y pensar acerca de su nueva empresa también como parte de su vida.
Un buen comienzo es presentar al empleado nuevo a los demás equipos, pueden hacer una videollamada conjunta para conocerse. Sin embargo, no estaría mal primero preguntar al novato si esto es de su agrado, ya que podría ser intimidante para algunos empleados más bien introvertidos.
Aunque aun así existen opciones para personas tímidas como, por ejemplo, llenar un cuestionario y socializarlo para conocerse a través de preguntas. La idea es que todos se sientan verdaderamente parte y tenidos en cuenta.
3 – Demuestra cuánto aprecias a tus empleados
Nunca está de más hacerle saber a tus empleados cuánto aprecias el hecho de que participen, acoten y critiquen constructivamente. Hacer sentir valorado a alguien es el primer paso para ganar su confianza y, consecuentemente, apertura, participación y colaboración.
Distintos estudios demuestran, de hecho, que aquellos empleados que solo trabajan para el desarrollo financiero de la organización no son tan proclives a disfrutar de su trabajo como aquellos que son reconocidos por sus esfuerzos y logros. Los empleados que sienten que están por fuera del radar tienden a desmotivarse con mucha más frecuencia.
Los líderes deberán, entonces, ponerse a la altura de la situación y demostrarles a sus equipos cuán importante es el trabajo duro para ellos y cómo este es tenido en cuenta.
4 – Ofréceles a tus empleados desarrollo personal y laboral
Aquellas compañías que realmente se preocupan por sus empleados son aquellas que se esfuerzan por tener las mejores versiones de cada uno de ellos. Es por eso que tu cultura laboral debería ofrecer posibilidades de crecimiento y desarrollo como un pilar infaltable.
Si quieres demostrar a tus empleados cuánto te preocupas por su bienestar, la siguiente lista será de ayuda:
5 – Pídeles a tus empleados que compartan sus críticas contigo
La única manera de saber si tus empleados son felices es, básicamente, preguntándoles. Es una buena idea mandar encuestas anónimas cada mes o al finalizar el año para que puedan sentirse libres de compartir sus preocupaciones y posibles mejoras.
De esta manera, podrás tener una idea certera de qué áreas es necesario reforzar o modificar y, además, quienes trabajan para ti podrán sentirse seguros en su ambiente de trabajo. Con esta técnica podrás hasta enterarte de cosas, que de otra manera, se te pasarían por alto.
Las críticas constructivas son pilares fundamentales para una buena cultura de trabajo. ¿Qué estás esperando para ponerlas en práctica?
En resumen, una efectiva cultura laboral es el camino al éxito, todo se basa en una buena y sólida comunicación para compartir de manera respetuosa entre los participantes del equipo de trabajo, brindando posibilidades que inciten al desarrollo y el crecimiento.
Con estos consejos en mente pronto tendrás equipos fuertes y comprometidos con los valores empresariales conjuntamente construidos.
Desde WeRemoto esperamos haberte ayudado y te deseamos un gran crecimiento junto a tu equipo remoto. ¡Adelante!