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La inteligencia artificial dejó de ser un experimento curioso para convertirse en una herramienta cotidiana. Hoy no hace falta ser diseñador para armar una ilustración, editar una foto o crear un visual atractivo para redes sociales o presentaciones.
En este sentido, existen varios modelos que generan imágenes a partir de texto, cada uno con su propio estilo y ventajas.
En este artículo te compartimos cinco de los más destacados en 2025, tanto si los querés usar en tu trabajo como si simplemente buscás explorar tu lado creativo. ¡Vamos!
1. Flux
Flux es relativamente nuevo, pero ya se ganó un lugar en esta lista. Forma parte de Grok, el chatbot de xAI, y genera imágenes con solo escribir una descripción.
Una de sus virtudes es la calidad: logra resultados con gran nivel de detalle y ofrece diferentes modos para ajustarse a un estilo más artístico o más fotográfico.
Su integración dentro del chat lo hace especialmente cómodo, porque no necesitás abrir otra aplicación ni aprender nada complejo.
2. DALL·E 3
DALL·E 3 es probablemente el modelo más conocido. Está integrado en ChatGPT, así que basta con escribir lo que imaginás para obtener una imagen en cuestión de segundos.
Una de sus mayores fortalezas es lo bien que interpreta las instrucciones: suele dar resultados bastante cercanos a lo que pediste.
Es ideal para quienes buscan algo rápido y sin complicaciones, aunque sigue teniendo algunas limitaciones en detalles pequeños como las manos o los textos dentro de las imágenes.
3. Nano Banana
El nombre puede sonar gracioso, pero Nano Banana es el motor de imágenes de Gemini, la IA de Google. Su mayor fortaleza es la edición.
Además de generar imágenes desde cero, permite modificar fotos ya existentes: cambiar un fondo, ajustar un color, añadir o quitar elementos, y todo sin perder coherencia.
Es especialmente útil en retratos, donde logra mantener los rasgos de las personas con más precisión que otros modelos. Aunque todavía es relativamente nuevo y menos explorado por la comunidad, apunta a convertirse en una opción muy sólida.
Firefly es la apuesta de Adobe y tiene la ventaja de estar totalmente integrado en Photoshop e Illustrator. Esto lo convierte en una herramienta natural para quienes ya trabajan con estos programas.
Su punto fuerte es el “relleno generativo”: seleccionás una parte de la imagen y le pedís que agregue, complete o modifique algo, y la IA lo hace en segundos.
También puede crear imágenes completas, pero donde realmente brilla es en agilizar los flujos de trabajo creativos. Además, Adobe respalda su uso con licencias claras, lo que da tranquilidad para proyectos profesionales.
Stable Diffusion es el veterano del grupo y uno de los más flexibles. Al ser de código abierto, podés instalarlo en tu propia computadora y personalizarlo con infinidad de modelos y extensiones.
Hay toda una comunidad que lo mantiene vivo, creando variantes y compartiendo recursos para lograr estilos específicos, desde arte digital hasta ilustraciones hiperrealistas.
Eso sí, no es la opción más sencilla: requiere algo de paciencia para configurarlo y un buen equipo si querés resultados en alta calidad. A cambio, ofrece una libertad creativa que pocos pueden igualar.
En resumen, cada modelo tiene su encanto, todo depende de lo que estés buscando. No hay uno que sea mejor para todo, pero sí hay uno que puede ser el indicado para lo que necesitás. La clave está en probar, jugar y encontrar el que se ajuste a tu forma de trabajar o crear. ¡Desde Weremoto te alentamos a que los pruebes!
